cada vez que escucho tu voz al otro lado del telefono...mi corazón se acelera un poco más de lo normal, mis sentidos tiemblan de emoción al sentirte por tan solo un segundo y quisiera que fueran incontables los segundos que dura esa llamada..para tenerte aunque solo sea en mi mente....en mi cabeza.
Te pertenece todo de mi; mis manos con las que intento tocarte, mis labios con los que anhelo besarte, mis ojos con los que siempre te busco detra de la oscuridad que dices te rodea...mi alma que lamenta el perderte por los siglos de los siglos..
Y es que adorarte no es más que el tormento indeseable del que no quiere escuchar...del terco idolatra!!!
En eso me he convertido...en seguidora de tus pasos, de tu rastro..de tu rostro. Adicta a tu olor...a tu indiferencia... ¿y que más podría ser esto, sino el karma que lamento y bendigo cada dia de mi vida?
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